lunes, febrero 4

Amor a primera vista. Parte II

Rene, enseguida nos vamos.- le decía una elegante señora de cabello corto del color de la noche y encrespado como la concha de un caracol, llevaba unos aretes en forma de argollas bañados en oro suponía Nubia, una camisa estampada en flores y un discreto pantalón de vestir caqui que acompañaba con sencillas alpargatas de color beige. Nubia supuso al instante que se trataba de la madre del niño, mejor dicho, era la madre de Rene, el chico desconocido por fin tenía nombre, lindo nombre pensó. Lo volvió a mirar y esta vez lo vio irse a un lugar en donde al parecer se estacionaban los autos de las personas que decidían degustar la carne asada en el local mismo de su venta, su madre decidió quedarse un poco más, lo vio alejarse también, se acomodó el bolso marrón al hombro y fue caminando en dirección a donde estaban la madre de Nubia, Mara (la amiga de la madre de Nubia) y su pequeño hermano Isaac, al parecer aquella señora conocía a Mara, porque Nubia jamás la había visto en su casa, y eso que ella conocía a la perfección a todos y cada uno de los amigos de su madre. Al llegar se saludaron con recatada elegancia como denotando una amistad de años y luego Mara procedió a presentar a su amiga a la madre de Nubia. La niña estaba encantada con que su madre ampliara su grupo de amistades y observaba con contenida fascinación como su madre y aquella señora entablaban una cordial y bonita amistad, por lo visto tenían muchas cosas en común, pensó Nubia, quien de un saltito se levantó y fue a donde su madre a pedirle un refrigerio, pero la excusa secreta de la niña era saludar también a la madre de Rene y comprobar si era tan amable y sociable como aparentaba serlo con su madre. 
Al llegar su madre volteó la vista hacia la madre de Rene y le dijo:
- Esta es mi niña, Mackie.- Nubia enrojeció de la vergüenza ya que su madre la presentó con su apodo de cuando tenía un año de vida, que desgracia, cielos, como pudo ser que su madre la presentara con su apodo de bebé ante una completa desconocida?, no sabía que hacer, solo miraba nerviosamente a aquella señora y esbozo una sonrisita nerviosa y algo torcida, la madre de Rene se acercó a ella y le acarició la cabeza en un tierno gesto de saludo y le dijo.
- Que linda.- Bueno, en verdad las presentaciones no estuvieron tan malas, pero a Nubia no se le quitaba el ardor en las mejillas, le sonrió lo más que pudo mientras la señora retiraba su suave toque de su cabeza y fue a sentarse en el mismo lugar en donde tuvo origen su curiosidad sin obtener su falso refrigerio, aunque no le importaba, pudo comprobar la amabilidad de la madre de Rene, encima la llamó de linda!. Las dos mujeres siguieron la charla mientras el pequeño Isaac se aburría más que una ostra, entonces la madre de Nubia la llama y le dice que ya estaban por irse, vaya, una alegría para el odioso Isaac pensó Nubia mirando de reojo a su pequeño hermano que esbozaba una dichosa sonrisita de jubilo. Y el hecho siguiente sucedió en retenida cámara lenta. Nubia caminando de la mano con su hermao Isaac, y su madre adelante de ambos, al parecer Mara ya se había marchado y la madre de Rene aparece con su coche estacionándose a un lado del estacionamiento y le dice a la madre de Nubia:
- Vamos Doña Inma, quiero que conozcas mi casa.- Doña Inma le indicó a sus dos hijos que se subieran a la parte posterior del coche mientras ella se acomodaba en el asiento delantero al lado de la madre de Rene, pero grande fue la sorpresa de Nubia, cuando al abrir la puerta del coche y sentarse en el medio se topó con él, Rene estaba sentado en el otro extremo del coche con una mano sobre su rodilla apoyando su rostro y con la otra tocaba el cerrojo de seguridad de la puerta del coche y al ver a Nubia le sonrió como si la conociera de algún lado, de seguro la recordaba mirándolo a hurtadillas en el encuentro anterior pensó Nubia, quien no dejaba de sonreírle como una tontaina.
- Hola.- Le dijo René
- Hola.- Le respondió Nubia

Continuará...

No hay comentarios:

Publicar un comentario